Esta sección debe considerarse propia de mentalidades ADULTAS y formadas pero, si con todo, le molesta la exhibición del cuerpo humano desnudo o en situaciones de erotismo explícito, por favor, opte por mirar otras secciones de las muchas que hay en este blog y que pueden ser más adecuadas a sus intereses personales.
Como es casi imposible medir el nivel de sensibilidad o estupidez de cada individuo, prefiero ir a lo seguro y clasificar este sitio como adecuado solo para adultos.
Aunque ese término es todavía etéreo y nebuloso para mí, la advertencia deja claro que la responsabilidad sigue siendo del espectador.
Naomichi Okutsu es un artista japonés que desarrollo un arte gay, en principio militante y para revistas del sector.
Para el que esto escribe hay etiquetas que a veces son necesarias (cuando realmente ayudan a contextualizar una obra y ayudan también ampliar todas sus posibilidades expresivas) y otras veces sobran (cuando guetizan y asfixian esas posibilidades expresivas), especialmente si hablamos de arte.
En el caso que nos ocupa y si el propio autor milita, me callo.
Abordar cualquier temática humana sin límite ni restricciones parece una prerrogativa que no debería perder el artista desde que conquistaron ese derecho las ya lejanas vanguardias de principios del siglo XX, aunque todavía este vigente la polémica decimonónica de arte por el arte versus arte con finalidad.
Okutsu -provocador de bajo voltaje- sea su fin alegrar el ojillo de algunos (¡hay que ver lo que da de sí el pulpo chupador!), visibilizar según que realidades (aunque su significado quede algo oculto por su simbología a los occidentales) o simplemente ilustrar el mundo ensoñativo homosexual consigue, en cualquier caso, algo más con sus dibujos a lápiz pintados con acrílicos.
Todas las imágenes y/o vídeos que se muestran corresponden al artista o artistas referenciados.
Su exposición en este blog pretende ser un homenaje y
una contribución a la difusión de obras dignas de
reconocimiento cultural, sin ninguna merma a los derechos que correspondan a
sus legítimos propietarios.
En ningún caso hay en este blog interés económico
directo ni indirecto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario