París bien merece más de un "pateo".
En cualquier iglesia, pasaje o tienda encuentras cosas dignas de ser miradas y disfrutadas.
Claro que no todo es maravilloso.
En cualquier iglesia, pasaje o tienda encuentras cosas dignas de ser miradas y disfrutadas.
Claro que no todo es maravilloso.
Hay un gran handicap (entre otras cosas) a la hora de visitar tan hermosa ciudad: el precio abusivo de sus cafés en todas las terrazas (entre 4 y 6 euros).
El descanso del visitante requiere combustible y a esos precios... menos mal que a última hora dimos con una solución intermedia: ¡Un Starbucks! (lamentablemente una cadena americana con muy poco glamour) ofrecía cafés "creme" a un precio menos abusivo (el más grande -casi una bañera- a 3,95e)
Pues si dan "cafélicos" como una bañera aquí los damos como un piano...
ResponderEliminary "eske" cómo se nota que somos de Bilbao! Preciosas y sugerentes imágenes, por
cierto.